Si hay una composición poética arraigada en las costumbres líricas latinoamericanas, esa es la décima. Y entre las formas métricas y de rima en la que esta puede presentarse, es la espinela la de mayor alcance.
Ahora bien, ¿y acaso hablar de décima no es hablar de espinela directamente? Sí, lo es. Es solo que la espinela es una de las tantas variantes que posee la décima. Hay quien tiende a pensar que todas las décimas son espinelas, y eso no es correcto. La espinela, como tal, tiene sus particularidades métricas, de rima, e, incluso, gramaticales.
¿Qué es una décima?
Para poder explicar bien, es bueno, primeramente, tener claros los términos. Una décima no es más que cualquier composición poética que tenga estrofas de diez versos. Así como existen las octavas, de 8 versos; o las cuartetas, de cuatro versos. El número usado para englobar la forma poética, en sí, no necesariamente determina la cualidad de los versos usados, sino que, simplemente, señala el tamaño de la estrofa.
Por lo tanto, y siguiendo la idea del párrafo anterior, hay tantas variantes de la décima como se puedan crear según la imaginería popular. Yo, en estos instantes, podría decir que hay una décima de la siguiente forma: AbAb-Bccdcd. En este caso, y para los no conocedores, las letras mayúsculas indican versos de arte mayor (de nueve sílabas en adelante); y las minúsculas, versos de arte menor (de 2 a 8 sílabas, respectivamente). El punto que puede verse allí indica una pausa.
Lo común en este tipo de forma poética es que los versos sean octosílabos, pero no es una ley absoluta. Incluso, hay quienes les incluyen versos sueltos.
Aportes del poeta español Francisco Redondo
El poeta español Francisco Redondo —estudioso y conocedor de la décima—tiene muchos ejemplos al respecto en su blog ciposfred.blogspot.com. Él, desde 2007, se ha encargado de educar al respecto, mostrando las posibilidades en torno a las combinaciones que pueden hacerse con las décimas.
Hay una fórmula a la que llama “4+6”, la cual no es más que la mixtura de una redondilla más una sextina (abba-cdcdcd) o de una cuarteta más una sextina (abab-cdcdcd). Por supuesto, hay otras posibilidades, las cuales llevan practicándose ya desde hace más de 500 años en las distintas tierras en las que ha llegado la décima.
Aportes de la poetisa Amalia Lateano
Para reforzar la tesis referente a la antigüedad del uso de estas variantes de la décima citaré un comentario hecho por la poetisa Amalia Lateano en 2017. Al respecto, ella planteó lo siguiente:
"La décima antigua es una combinación de diez versos octosílabos que riman en consonante y se dividen en dos grupos: uno de cuatro seguido de otro de seis; o uno de seis versos seguido del grupo de cuatro. Puede tener entre dos y cinco rimas distintas, que en el grupo de cuatro versos suelen ir abrazadas (abba) o cruzadas (abab) y adoptan disposiciones más variadas en el grupo de seis versos: cddcdc, bcddcd, cdcdcd... etc".
Ejemplo de una décima no espinela:
“De hambre los hombres morían,
azules, amarillos todos,
y no puedo explicar cómo
eso a mí me consumía
el alma, el hueso, el codo,
cada pedazo de existencia,
pensando en mis querencias,
en mi pueblo de mar y sal,
nos toca solo esperar,
la bendición divina”.
Juan Ortiz
Fórmula asonante: ababaccdd-. (el “-” indica un verso suelto).
Es importante acotar que después de que se impusiera la décima espinela como la máxima expresión en dicho formato, el resto de décimas fueron llamadas por los puristas “décimas falsas”.
¿Qué es una espinela?
Ahora bien, una espinela es un tipo de décima que, según la historia, ideó Vicente Espinel. ¿Por qué digo “según la historia”?, bueno, porque hay detractores que señalan que él simplemente la compiló en su libro «Diversas rimas» (1591), mas la fórmula perteneció a otro poeta. Ahora bien, eso ya queda por parte de cada quien si investigar o no al respecto.
Décima escrita por Espinel en su libro «Diversas rimas»:
“No hay bien que del mal me guarde,
temeroso y encogido,
de sinrazón ofendido,
y de ofendido cobarde.
Y aunque mi queja, ya es tarde,
y razón me la defiende,
más7 en mi daño se enciende,
que voy contra quien me agravia,
como el perro que con rabia
a su mismo dueño ofende”.
Estructura de la espinela
En cuanto a la estructura de la espinela, obviamente, tiene diez versos. Estos, en cuanto a su métrica, son octosílabos. Su rima, según lo determinado por Espinel, debe ser consonante y distribuida de la siguiente manera: abba.accddc. El punto en el cuarto verso es otra cualidad que determina a esta composición. Indica que el motivo poético debe estar contenido en la redondilla inicial. La sextina siguiente (nombre que reciben los seis versos restantes) desarrolla el tema planteado por la redondilla.
¿Qué es una redondilla?
Es bueno tener claro cada concepto para comprender bien el tema. La redondilla no es más que una composición poética de cuatro versos de arte menor que rima: abba.
Ejemplo:
“En tu traje claro oscuro
bailas al son de la brisa,
con tus alas de sonrisa
y esos ojos de conjuro”.
Juan Ortiz
Cualidades definitivas de una décima espinela
Habiendo leído lo antes dicho, se tiene que esta posee:
- Versos: octosílabos.
- Rima: abba.accddc. Consonante.
- Un punto en el cuarto verso.
Ejemplo
“Yo viví con alcatraces,
entre redes y peñeros,
entre grandes compañeros,
muy humildes y capaces.
Qué momentos tan fugaces
atesoro en mi memoria,
eres parte de mi historia,
Punt’e Piedras, pueblo grande,
donde quiera que yo ande,
serás tú estrella notoria”.
Juan Ortiz
¿Quién le llamó espinela?
Si revisan el Diccionario de la lengua española, Volumen 3, página 606, allí reza: “… Llámefe Efpinela, por haber fido fu inventor Don Vicente Efpinel. Lat. Carmen decenverfuum…”.
Según, son palabras del mismísimo Lope de Vega, quien tuvo especial admiración por el ingenio de Vicente Espinel.
Datos interesantes sobre Espinel y su décima
Espinel solo escribió, según registros, 10 décimas
Si bien Espinel fue el creador histórico de la fórmula, solo hay registradas, formalmente, 10 décimas suyas. Dos de estas fueron dedicadas a don Gonzalo de Céspedes y Meneses, y 8 que aparecen en «Diversas rimas». Así que, antes de decir que Espinel escribió cientos de espinelas, es bueno revisar más a fondo.
Espinel pudo haber muerto sin comprender la magnitud de su aporte
Y sí, tal y como pasa con muchos creadores, Espinel pudo morir sin ver el tamaño de su aporte a la poesía. De hecho, la fama que toma la espinela, posteriormente, se debe a la propaganda que personajes como Cervantes y Lope de Vega le hicieron a la forma musical.
El aprecio de Cervantes y de Lope de Vega por Espinel
El intelecto, la gracia y el poder creativo de Espinel le llevaron a ganarse el aprecio de dos grandes: Cervantes y Lope de Vega. Estos maestros se encargaron de promocionar su obra.
Dijo Cervantes, desde su aprecio:
“Del famoso Espinel cosas diría
que exceden al humano entendimiento,
de aquellas ciencias que en su pecho cría
el divino de Febo sacro aliento.
Mas, pues no puede de la lengua mía
decir lo menos de lo más que siento,
no diga más, sino que al cielo aspira,
ore tome la pluma, ora la lira”.
Por su parte, Lope de Vega dijo:
“Hónrese bien de sus montañas Ronda,
pues hoy su Espino se convierte en palma segura,
que su nombre el Lete esconda”.
¿En dónde se usa la décima espinela?
En la Isla de Margarita, y en el oriente venezolano, es muy popular en los cantos de galerones y gaitas margariteñas. No obstante, en cada región latinoamericana se puede hallar una forma de ser cantada en los géneros tradicionales.
Y sí, toda espinela debe ser una décima, más no toda décima es espinela
Habiendo leído esto, si usted ve una décima que su rima no sea consonante, que no tenga un punto en el cuarto verso y que su fórmula no sea: abba.accddc, entonces no se trata de una espinela. No deja de ser décima, pero no es la popularizada por Espinel.